Aberrante caso en Dalcahue: violó a sus hijas y tuvo 3 niños con una de ellas
Los abusos partieron en el año 1997, y producto de las reiteradas violaciones, una de las víctimas tuvo tuvo tres hijos.
Impacto causó el miércoles 2 de julio de 2014 un aberrante caso de abuso sexual infantil en Dalcahue luego que la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de la Policía de Investigaciones de Castro detuviera en su domicilio a un "ejemplar" miembro de la comunidad y "abnegado" padre de familia que terminó siendo un depredador sexual de niñas contumaz según quedó demostrado en el juicio realizado hace pocos días atrás.
De acuerdo a antecedentes de la causa a los que accedió La Opinión de Chiloé, J.A.S.Z. (50 años) abusó sexualmente de sus dos hijas de manera reiterada desde que ellas tenían 8 y 9 años de edad, partiendo con la mayor en 1997 quien tras los sucesivos abusos quedó embarazada y dio a luz a tres hijos, para luego proseguir con la menor casi una década después cuando recién cumplía 8 añitos. Los hechos salieron a la luz cuando la mayor se atrevió a denunciar ya siendo una mujer adulta, revelándose además que su hermana (a esas alturas de 17 años) estaba internada en la unidad de psiquiatría del Hospital Dr. Augusto Riffart por las serias secuelas derivadas del abuso de su propio padre.
Luego de la denuncia, se inició un tortuoso y largo proceso investigativo que incluyó una serie de peritajes psicológicos, psiquiátricos y biológicos (ADN) para reconstruir los impactantes hechos que por casi dos décadas estuvieron en el más absoluto secreto y que se terminaron por revelar de manera pormenorizada en el juicio que se realizó la semana pasada en Castro, y que el día de ayer tuvo su sentencia en el Tribunal Oral en lo Penal.
Lo impresionante de todo es que si la víctima ahora mayor de edad hubiera esperado más tiempo para realizar la denuncia, el violador hubiera quedado libre (al menos en el caso de ella) ya que parte de los abusos habrían ocurrido antes del 23 de agosto del año 2007, y en tal caso, la prescripción se da hasta 10 años después de ocurrido el hecho.
Durante el juicio se acreditó que el padre abusó de la hija mayor entre 1997 y abril de 2013 aprovechando las ocasiones en que se quedaban solos: la agredía sexualmente y la amenazaba permanententemente mientras simulaba una perfecta vida familiar. Respecto a la menor de las víctimas, se pudo constatar que los abusos se perpetraron entre 2005 y el verano de 2011.
El sujeto, ahora en la cárcel de Alto Bonito de Puerto Montt, fue sentenciado a un total de 17 años de presidio.