10 años de internación cerrada para líder de brutal ataque en Bellavista, Ancud
La víctima de 62 años perdió un ojo tras ser brutalmente golpeado, mientras que el lugar donde vivía fue quemado intencionalmente.
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Tras ser declarados culpables, finalmente se leyó la sentencia en el Tribunal Oral en lo Penal de Castro que declaró culpables a la banda de tres delincuentes juveniles que el pasado 24 de abril ingresaron a la vivienda de don Pedro Hernández (62 años), cuidador del Parque Bellavista, robándole una seríe de pertenencias y golpeándolo de manera tal, que además de ocasionarle una serie de fracturas, le provocaron la pérdida de uno de sus ojos tras recibir golpes con un palo. Adicionalmente, le prendieron fuego a la casa, la que resultó completamente destruida.
El líder del grupo fue encontrado culpable por los delitos de robo con violencia e incendio con resultado de lesiones gravísimas, siendo sentenciado a 5 años y 1 día por cada delito de manera sucesiva: pasaría en un centro de internación cerrada (no cárcel) por 10 años y dos días, dado que cometió ambos delitos siendo menor de edad.
Un segundo menor fue encontrado culpable de los delitos de robo con violencia e incendio y deberá pasar 541 días de libertad asistida especial por primer delito, mientras que por el segundo, deberá cumplir 3 años bajo internación cerrada, además, deberá estar 2 años en libertad asistida especial.
En el caso de la mujer implicada, se le encontró responsabilidad en el delito de robo con violencia por lo que deberá cumplir 540 días de libertad asistida especial.
Según antecedentes que se manejaron en la causa, don Pedro fue atacado y golpeado salvajemente, logrando escapar sin que lo vieran mientras se prendia fuego a la casa donde residía (se acreditó que fue intencional), salvando su vida, aunque quedó con serias secuelas. El mismo don Pedro ha declarado:
"(...) que estando la casa en llamas, tuve que salir de manera que nadie me viera y esconderme en el pasto para que no me siguieran agrediendo lo que me permitió salvar mi vida. (...) Que con motivo del ataque sufrido perdí mi ojo, sufrí diversas fracturas en mi cuerpo, además del impacto al sentir que una turba me queria asesinar".
Cabe recordar que según el mayor de Carabineros Miguel Gatica, durante la noche del ataque uno de los delincuentes fue capturado mientras escapaba hacia el sector de Caracoles ensangrentado. En el caso de los dos menores también implicados (el otro varón y la mujer), fueron capturados posteriormente.
